Tenemos mucha suerte. De vivir en Santander y poder disfrutar de unos inviernos benévolos. De estar en Cazoña y gozar de unos espacios amplios y ajardinados. De poder aprovechar una enseñanza pública con todos los derechos. De tener mamás que nos preparan un almuerzo para pasar mejor la mañana. De conocer a una tutora tan creativa y entusiasmada como Nawal.
Tenemos mucha suerte de parar una rato nuestra rutina de actividades y juegos y reposar mientras nos tomamos un almuerzo. Y queremos que lo sepáis.
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